CONSEJOS PARA EL 1ER MES DE SU LLEGADA

1. El que mejor sabe lo que necesita es tu bebé

lo mejor es escucharlos y dejarlos en standby por si en algún momento consideres oportuno llevarlos a cabo, teniendo claro que la persona que mejor sabe lo que necesita el bebé, es el bebé: si llora, la cosa va mal; si no llora, la cosa va bien.

2. Disfruta cogiéndolo tanto como quieras

Cuando anuncias el embarazo la gente se emociona porque vas a tener un bebé precioso al que dar mucho amor, y del que recibir mucho amor también.

Cógelo todo lo que quieras, esté llorando o no, porque los hijos se tienen para quererlos mucho, muchísimo, y disfrutar con ellos y de ellos.

3. Es mejor visitar que te visiten

En realidad depende de la manera de actuar de los familiares y amigos. Si son de esas parejas con un entorno directo de «meterse hasta en la cocina» y de hacerlo incluso cuando no los hallas invitado (aquello de «pasábamos por casa y nos hemos dicho: vamos a darles una sorpresa y nos quedamos a comer, almorzar y cenar»), puede ser mejor ofrecer ustedes a ir a verlos cuando consideren que sea el momento, que esperar a que vengan.

4. Lávate las manos siempre antes de tocarlo

Sí, ya sé que eres su padre y estás completamente sano. Da igual, toda persona que vaya a tocar al bebé tiene que lavarse las manos antes de hacerlo, sobre todo si viene de la calle. En las manos viajan gérmenes y patógenos de un lado a otro.

5. Tenlo todo bien preparado antes de hacer nada

En el primer mes vale la pena detenerse a hacer una prospección mental del que será el momento, para tenerlo todo preparado de antemano.

6. Ponlo siempre a dormir en decúbito supino

O lo que es lo mismo, boca arriba con la cabeza ladeada. Es el modo más seguro de dormir (el que deriva en menor riesgo de muerte súbita).

7. Salir un rato a la calle cada día

Aunque lo tengas todo por hacer. Tranquilos, no son los únicos: todos hemos pasado por eso y aunque parezca mentira, romper con el ambiente, el entorno y la casa, ayuda.

8. Seca bien en los pliegues de la piel

En las axilas, las ingles y el cuello sobre todo. No dejes de pasar la esponja por ahí y seca bien esas zonas, porque si no quedan húmedas y se empiezan a hacer lesiones que luego cuesta curar.

9. Aprovecha el ‘momento crema’ para hacerle masaje

No es que los bebés necesiten crema hidratante (la mayoría no la necesitan), pero es un momento perfecto para darle un pequeño masaje: suave, sin hacer fuerza, solo moviendo un poco sus extremidades y poniendo la crema en todo el cuerpo. Ahora por aquí, ahora te pongo de lado, ahora un momento boca abajo, ahora del otro lado, te masajeo la cabecita, los brazos, la barriguita, las piernas, los pies…

10. Déjale claro cuándo es de día y cuándo es de noche

Se podría decir que la mayoría de bebés nacen con el sueño cambiado, y es que tienden a repetir fuera los patrones que seguían dentro: por el día muy tranquilos, con el vaivén de los movimientos de mamá, y por la noche ‘fiesta’, aprovechando que está quieta.